Para realizar satisfactoriamente el ensayo, los recubrimientos deben estar adheridos sobre el substrato donde se han aplicado. Existen tres procedimientos diferentes de ensayo de adherencia para evaluar la resistencia de las pinturas al ser separadas del substrato.
El ensayo de corte enrejado, también conocido como corte paralelo cruzado, utiliza una cuchilla de corte que atraviesa el recubrimiento hasta llegar al substrato. Como mínimo se han de realizar dos cortes, con intersecciones en ángulo de 90 grados, para conseguir un modelo enrejado correcto. Se observa el área del corte enrejado para determinar cualquier fallo de adherencia. El segundo método de ensayo de adherencia del recubrimiento, es aplicar diferentes pesos sobre un cincel o punzón hasta que el recubrimiento ha sido sacado del sustrato. El tercer método llamado de adherencia por tracción, mide la fuerza necesaria para arrancar el recubrimiento del substrato. Se pega una sufridera en la superficie del recubrimiento y una vez que el adhesivo se ha secado completamente, se une a la sufridera un dispositivo de tracción. Se aplican incrementos de fuerza, en dirección perpendicular, hasta que el recubrimiento de debajo de la sufridera se despega del substrato. Se anota cual es la mínima fuerza que causa el fallo de adherencia.